ARTE

Una de las misiones del arte de es develar aspectos que otros inadvierten...

miércoles, 6 de marzo de 2013

JUAN PÉREZ JOLOTE SINÓNIMO DE RESILIENCIA



Juan Pérez Jololote de Ricardo Pozas... Sinónimo de resiliencia.

Cuantos recuerdos pueden evocar al hacer una lectura de algún cuanto o una novela, pues es común que encuentre aunque sea mínimo, detalles con los cuales pueda identificarme con el personaje en cuestión, y al parecer Juan Pérez Jolote de Ricardo Pozas no fue la excepción.
          Al adentrarme a la lectura de esta novela que no es más que la biografía de un chamula tzotzil, vinieron a mi mente recuerdos que por alguna razón los había bloqueado, y que realizar la lectura retornaron a mí; el maltrato físico y verbal por el que Juan Pérez jolote tuvo que pasar, volvió a despertar en mi interior esa rabia y coraje que en mi niñez sentí al ser de igual manera vejado por una persona mayor, que a diferencia de Pérez Jolote, esta humillación era por parte de un hermano de mi madre.
          He de reconocer que en una parte de mi infancia al igual que Juan, existía en mi cierta debilidad, incluso más por el trabajo rudo de campo que esta persona me exigía cada vez que solo con el me quedaba, y era ahí donde el aprovechaba para realizar tal vilipendio, quizá este familiar su molestia era por la fragilidad en la que vivía, a lo cual era motivo suficiente para golpearme y agredirme de manera verbal.
          Esto ocasionó que creciera con un odio hacia esta persona, y buscara siempre, la manera de como escaparme o evadir aquel suplicio, y lo primero que se me ocurrió fue argumentar las ganas y el deseo continuar mis estudios en otro lugar, tuve que esperar hasta terminar la educación básica para poder emigrar, y así huir de aquel tormento.
          Es común presenciar este tipo de actos en zonas rurales y áreas marginadas, en la mayoría de los casos la exigencia de un padre alcohólico y golpeador que terminan con la huida del infante, regalándose con el primero en turno, intentando encontrar mejor vida y a veces con la mala suerte caer en un peor lugar; al igual que le aconteció a Pérez Jolote, cayendo de persona en persona y cada una un trato distinto y malo, al mismo tiempo de esto la explotación de su mano de obra.
          Cada uno enfrenta de forma distinta estas adversidades, puedes continuar con esa debilidad, hacerte más débil, o darle la vuelta la moneda y convertirte en un ser resiliente, recibiendo cada golpe, y acogerlo como una oportunidad más para superarte. Solo hay dos caminos, uno, seguir siendo esa persona débil de la cual todos se aprovechan o dos, sacar el coraje y la casta y realizar esa metamorfosis necesaria para ser alguien importante.
          Cuan difícil y dura es la vida cuando nos vemos obligados a desprendernos de nuestro núcleo familiar, lejos de nuestra casa, lejos de papá y mamá, de nuestros hermanos, pero cuan necesario es, pues si esto no fuera posible perderíamos la oportunidad de crecer como personas. Al realizar mi lectura no puede evitar recordar una bonita historia del “canto rodado” como es el proceso por el cual estas piedras pasan para convertirse en lo que ahora son, cantos rodados, estas en algún momento de sus vidas se desprenden de la base de la montaña y llegan a caer a un caudaloso arroyo, el cual esta piedra en un principio rustica, sin horma ni forma, llena de picos toda deforme, empieza a ser arrastrada por el caudal del torrente y por ende golpeada y maltratada por el mismo, empieza a chocar con otras rocas más grandes, estos golpes van haciendo que la piedra se vaya puliendo hasta darle forma, lo que antes no tenía, así va siendo arrastrada hasta llegar al final que es la desembocadura del riachuelo, que es el mar, ahora esta roca ya convertida en un canto rodado yace en las arenas de las playas del inmenso mar, ahora puede es apreciada por las personas que ahí caminan, llegan los niños y las juntan, las ven bellas y hermosas, lo que antes sería imposible puesto que fue una roca deforme.
          Los golpes y las adversidades de la vida nos van haciendo más fuertes y bellos en interior, al grado de ser apreciados y admirados por otras personas así como sucede con el canto rodado. Sin estos acontecimientos el ser humano difícilmente podría crecer.
          Al igual que nuestro amigo Juan paso por muchas adversidades y al fin pudo superarse, pero por desgracia cometió el error de repetir patrones de conducta de su padre, así en nosotros esto es muy común, y si no lo sabemos manejar nos regresara como al principio. Con esto no quiero decir que todo niño deba de ser golpeado y maltratado, si no que a cada uno de nosotros nos toca vivir a una vida distinta y esta nos tratara de múltiples y diversas formas a algunos nos castigara más que a otros pero por fortuna no más de lo que no podamos soportar.
          Así que piensa, la próxima vez que sientas que la vida te trata muy duro, o sientes que te golpea muy fuerte, recuerda que esto es un mal necesario, indispensable para tu crecimiento como ser humano, cada obstáculo que se te presente tómalo como una vitamina que hará crecer mas tu resistencia física, te ayudara a limar tus asperezas, te quitara lo rustico, las puntas, las deformaciones, te irá puliendo con los azotes hasta convertirte en un hermoso canto rodado.





Posas, Ricardo. Juan Pérez Jolote: biografía de un tzotzil, 3eraed. México, Fondo de Cultura Económica, 1973.
117 p. (Colección popular; vol. 4)

1 comentario: